
Dirección y guion de David Segarra. TeleSur. Veneuela, 2011. 70 mins.
En la madrugada del pasado 2 de mayo, el Conscience, un barco de la Flotilla de la Libertad de Gaza, se encontraba a 14 millas náuticas de Malta con una treintena de voluntarias de diferentes países a bordo. La embarcación iba rumbo a Gaza, para desafiar el asedio del enclave por parte de Israel y entregar ayuda humanitaria. Diversas ONG denuncian que el Estado sionista lleva dos meses sin permitir la entrada de alimentos en la Franja y que la población se enfrenta al hambre extrema.
Sin embargo, la misión del Conscience nunca pudo cumplirse, ya que la proa del buque fue atacada por drones, lo que provocó un incendio y una brecha en el casco y dejó el barco inutilizable. Las activistas tuvieron que emitir un SOS para ser rescatadas y volver a tierra firme.
Este ataque, aunque mucho menos grave, nos recuerda al asalto a la Flotilla de la Libertad que se produjo el 31 de mayo de 2010. Entonces, la «Flota de la Libertad» pretendía llevar unas 10.000 toneladas de ayuda humanitaria a la Franja, rompiendo el bloqueo que había impuesto Israel sobre los territorios palestinos. 633 personas de 37 países países distintos viajaban a bordo de seis embarcaciones (sobre todo dirigidas por personas turcas, griegas, irlandesas y estadounidenses), hasta que el ejército israelí llevó a cabo la Operación Brisa del Mar y atacó y abordó los buques utilizando helicópteros, granadas aturdidoras, gases lacrimógenos, tásers y munición real.
El barco más perjudicado por el asalto fue el Mavi Marmara (o “Mármara Azul”, con bandera de Comoras y tripulación turca), donde murieron tiroteados en el momento 8 activistas y un periodista. Un último herido grave estuvo en coma durante cuatro años, hasta que falleció en 2014, por lo que el total de muertes asciende a 10 (9 de ellos turcos de 31 a 61 años y uno estadounidense de 19 años de edad). Además, otras seis activistas desaparecieron y se les presume muertas, y decenas de personas resultaron heridas de gravedad. Una investigación posterior desvelaría que los soldados sionistas tenían una ‘kill list’, una lista de personas a las que asesinar. Las autopsias mostraron que 6 de los fallecidos habían sido disparados en la cabeza a bocajarro y que 5 tenían heridas en la espalda con munición de 9 mm.
Tras el asalto, la flota fue conducida a Israel, donde unas 600 personas fueron detenidas y muchas de ellas torturadas. Entre ellas se encontraba el periodista valenciano y director de Fuego sobre el Mármara, David Segarra i Soler, que permaneció en prisión durante 3 meses antes de ser puesto en libertad.
El documental relata con detalle cómo se produjo el asalto y se puede ver a continuación.