A por una huelga indefinida…

Este 8 de marzo estamos llamadas a la Huelga General Feminista Internacional. Tradicionalmente, la huelga ha sido una de las formas de protesta más audaces para exigir y reivindicar mejoras en las condiciones de vida por parte de aquellos que, al no disfrutar de los medios de producción, nos vemos sometidas a emplear con nuestro tiempo y nuestra fuerza de trabajo, parte de la vida para quienes sí los poseen. Si bien existen distintos tipos de huelga, la huelga laboral ha sido a lo largo de los siglos XIX y parte del siglo XX, una de las expresiones, junto con el boicot y el sabotaje, más eficientes para hacer tambalear al capital.

A la huelga le suelen seguir los piquetes, tanto para reducir al máximo los posibles esquiroles en la empresa, como piquetes informativos, y aquellos que intentan por todos los medios que la huelga sea secundada a través de acciones como el corte de ruta, el cierre de negocios o el impedimento de circulación del trasporte público, por ejemplo.

Sin embargo, en los últimos tiempos, las huelgas generales de un solo día, apenas pasan del plano simbólico. Esta es una demostración de fuerza, pero no plantea conflicto real contra el capital. Así, las distintas huelgas de 24 horas en el Estado Español del último milenio no consiguieron derogar ninguna de las leyes: reforma laboral, reducción salarial y ajuste de austeridad, por las que se llevaron a cabo:

2002: Huelga general de 24 horas celebrada el 20 de junio, convocada por UGT y CCOO contra la reforma del subsidio de desempleo, dentro del gobierno de José María Aznar.

2010: Huelga general celebrada el 29 de septiembre de 24 horas convocada por CCOO, CGT y UGT contra la reforma laboral, la reducción salarial en el sector público y la congelación de las pensiones. Dentro del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

2012: 1ª Huelga general celebrada el 29 de marzo de 24 horas convocada por ELA, LAB, USO, CIG, CUT CSI, CGT, CNT, CCOO Y UGT contra la séptima reforma laboral aprobada el 19 de febrero por el gobierno de Mariano Rajoy.

2012: 2ª Huelga general celebrada el 14 de noviembre de 24 horas convocada por ELA, LAB, USO, CIG, CUT CSI, CGT, CNT, CCOO Y UGT contra las políticas de ajuste del Gobierno. También impulsada por el gobierno de Mariano Rajoy.

El año pasado, cuando escuchamos eso de una Huelga Feminista, no hubo quien no se llevase las manos a la cabeza y criticara, hay quienes con acierto, la invalidez de una huelga solo de mujeres. Esto es, si en el ámbito laboral los hombres asumen la cuota de mínimos, el efecto de perjuicio contra el capital no se vería realizado, asimismo las reivindicaciones se centraban más en las ideas pequeño burguesas que en un argumentario de las proletarias, racializadas y migrantes que somo quienes tenemos mucho que perder. Prevaleciendo la idea de romper un techo de cristal y pidiendo al Estado protección y amparo. Cuando ya sabemos que aquellas que quieren romper el techo de cristal ya están bastante arriba, y, que de ser empresarias no dudaran en implementar un ERE si fuera necesario, siendo la mayoría de las veces las mujeres las que salimos peor paradas. Al mismo tiempo el Estado es un intermediador de las finanzas y quita y da dependiendo, no de los votos y reclamas en las calles, sino de los mercados en el mundo.

Secundamos plenamente la convocatoria de la Huelga General Feminista Internacional, y nos alegramos de ver cómo, a diferencia del año pasado, el argumentario del 8M (Madrid) es plenamente consecuente con una lucha interseccional, poniendo el foco en las de abajo, las migrantes, racializadas, lesbianas, trans, putas, trabajadoras, pobres, extranjeras, gitanas, payas, bisexuales, CIS, las de abajo, las que venimos luchando por la emancipación universal, contra el Capital, el Patriarcado, el Estado, el Colonialismo, el Imperialismo y el consecuente abuso de nuestros comunes naturales, la tierra.

Si en el siglo XIX y parte del XX se consiguieron no pocas conquistas que permitieron a la clase trabajadora vivir una vida mucho más digna, no fue sin el esfuerzo de una lucha continua, combativa y constante.

Hoy, no se trata de romantizar aquellos años revolucionarios, sino por el contrario, recuperar las prácticas políticas que sirven al movimiento feminista para comenzar, desde las alianzas y el tejido social, a organizar una lucha que supere las 24 horas de huelga y aglutine las luchas en una sola fuerza.

Más allá de proyectar la idea de una huelga indefinida y recuperar las prácticas de lucha tradicionales, urge darle visibilización a la lucha. La huelga feminista no es un simple movimiento espontaneo de un día concreto, el 8 de marzo. Somos muchas las que, a lo largo de todo el año, organizadas en nuestros colectivos, avanzamos en una u otra dirección. La lucha del XIX significaba también que los obreros los domingos iban juntos a comer a las plazas para crea el sentimiento de pertenencia y unidad. Para visibilizar tal comunión y festejarla.

Hemos de estar vivaces y saber que corremos el riesgo de que después de una movilización la gente se pierda en sus espacios privados y no permanezcan para darle una continuidad. En palabras de Ángela Davis:

Los millones de personas que van a una manifestación, han decidido que no se sienten necesariamente responsables de seguir creando apoyos para la cusa. Pueden regresar a sus espacios privados y expresar su relación con el movimiento de maneras privadas, individuales. Si la manifestación es el momento público de la memoria y la gente vuelve después a unas vidas que interpretan como algo privado, entonces en cierto modo hemos cedido sin darnos cuenta al impulso corporativo de privatización. Organizarse no es movilizarse1.

¡POR UNA FUERTE ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL DE LIBERACIÓN DE LAS MUJERES! ¡LUCHA CONTRA EL SISTEMA IMPERIALISTA PATRIARCAL! ¡¡¡A POR LA HUELGA INDEFINIDA!!!

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1 “Una historia de la conciencia -ensayos escogidos-“. Ángela Davis. Ed. BAAM pag 213.

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